DÍA 9 LLEGADA A PHNOM PENH
Llegamos a eso de las nueve y media, empieza nuestra aventura.
EL VISADO
Lo primero que hay que hacer es el visado, pues bien en el avión rellenamos un papelito, y
pensábamos que entregándolo y pagando pues asunto arreglado.
Bajamos del avión, y nos fuimos directamente a las cabinas donde suelen hacer la fotografía y
tomarte las huellas, pues va a ser que no, primero hay que pasar por caja, son unos mostradores
que están enfrente y donde los funcionarios camboyanos se van pasando tu pasaporte y a los
cuales les entregas una fotografía, luego vas dos metros más a la derecha, donde te llaman para
que abones el pago, en este caso 60$ dos personas o sea 30 dólares ( por lo que se ve es algo
más barato de lo que había leído) y te dan la documentación, con todo ello te vas a las cabinas
donde te toman las huellas y las fotos, pasado estos trances, ya solo queda recoger las maletas y
a disfrutar del viaje.
Salimos del aeropuerto y me acerque al quiosco de los taxis, que casualidad para llegar a mi hotel
el precio más caro, pues no, va a ser que no pillo taxi, creo que me pidieron 12$, así que
pregunte a los tuc- tuc y conseguí uno por 8$, tampoco tenía muchas ganas de regatear así que al
hotel.
El hotel el King Grand Boutique, la habitación bien fea y pequeña, eso si la ubicación del hotel
excelente y al menos tenia las vistas hacia la plaza, eran cerca de las 11 y media de la noche, así
que a descansar.
Nos levantamos tempranito, para estar justo a la apertura del Palacio Real y sino fuimos los
primeros muy cerca estuvimos, entramos sobre las ocho y media, fue perfecto porque
prácticamente lo vimos solos y es una gozada porque en cuanto llegan los chinos se acabó la
tranquilidad, que conste que no tengo nada contra los chinos, pero es que son unos tocapelotas,
no te dejan hacerte una foto, chillan, gritan, y son miles y más miles.
Terminada la visita al Palacio, nos fuimos a What Ounamon], que está a 100 metros escasos
del Palacio, saliendo a la izquierda.
El resto de la mañana la pasamos paseando por el cauce del rio y esquivando a los tukeros ,
pesaditos son.
Nos tomamos unas cervecitas, y acordamos un mini tour con un tuc tuc por 7$, por la ciudad de
una horita, con este mismo quedamos al día siguiente para que nos llevara al aeropuerto también
por 7$.
A eso de las dos fuimos a comer, nos salió por unos 16$, pollo, ensalada, patatas fritas, y las
bebidas.
Como hacía mucho calor nos fuimos al hotel a descansar.
Por la tarde dimos una vuelta por las calles, por el rio, y por la plaza donde se concentra muchísima gente y hay muchísimas palomas.
Nos compramos un heladito,(correremos el riesgo) y empezaron a caer unos goterones, una hora
y media lloviendo a todo trapo, que manera de llover así que nos sentamos en un restaurante y
nos pedimos una pizza y una ensalada más las bebidas 17 $, cuando nos íbamos al hotel estaba
todo vacío, apenas había gente en la calle.
Phnom Penh, pues no sé yo que decir, es una ciudad sucia muy suciaaaaa, y huele mal muy malllllll, es una pena, y muchas, muchas motos.
Llegamos a eso de las nueve y media, empieza nuestra aventura.
EL VISADO
Lo primero que hay que hacer es el visado, pues bien en el avión rellenamos un papelito, y
pensábamos que entregándolo y pagando pues asunto arreglado.
Bajamos del avión, y nos fuimos directamente a las cabinas donde suelen hacer la fotografía y
tomarte las huellas, pues va a ser que no, primero hay que pasar por caja, son unos mostradores
que están enfrente y donde los funcionarios camboyanos se van pasando tu pasaporte y a los
cuales les entregas una fotografía, luego vas dos metros más a la derecha, donde te llaman para
que abones el pago, en este caso 60$ dos personas o sea 30 dólares ( por lo que se ve es algo
más barato de lo que había leído) y te dan la documentación, con todo ello te vas a las cabinas
donde te toman las huellas y las fotos, pasado estos trances, ya solo queda recoger las maletas y
a disfrutar del viaje.
Salimos del aeropuerto y me acerque al quiosco de los taxis, que casualidad para llegar a mi hotel
el precio más caro, pues no, va a ser que no pillo taxi, creo que me pidieron 12$, así que
pregunte a los tuc- tuc y conseguí uno por 8$, tampoco tenía muchas ganas de regatear así que al
hotel.
El hotel el King Grand Boutique, la habitación bien fea y pequeña, eso si la ubicación del hotel
excelente y al menos tenia las vistas hacia la plaza, eran cerca de las 11 y media de la noche, así
que a descansar.
Nos levantamos tempranito, para estar justo a la apertura del Palacio Real y sino fuimos los
primeros muy cerca estuvimos, entramos sobre las ocho y media, fue perfecto porque
prácticamente lo vimos solos y es una gozada porque en cuanto llegan los chinos se acabó la
tranquilidad, que conste que no tengo nada contra los chinos, pero es que son unos tocapelotas,
no te dejan hacerte una foto, chillan, gritan, y son miles y más miles.
Terminada la visita al Palacio, nos fuimos a What Ounamon], que está a 100 metros escasos
del Palacio, saliendo a la izquierda.
El resto de la mañana la pasamos paseando por el cauce del rio y esquivando a los tukeros ,
pesaditos son.
Nos tomamos unas cervecitas, y acordamos un mini tour con un tuc tuc por 7$, por la ciudad de
una horita, con este mismo quedamos al día siguiente para que nos llevara al aeropuerto también
por 7$.
A eso de las dos fuimos a comer, nos salió por unos 16$, pollo, ensalada, patatas fritas, y las
bebidas.
Como hacía mucho calor nos fuimos al hotel a descansar.
Por la tarde dimos una vuelta por las calles, por el rio, y por la plaza donde se concentra muchísima gente y hay muchísimas palomas.
Nos compramos un heladito,(correremos el riesgo) y empezaron a caer unos goterones, una hora
y media lloviendo a todo trapo, que manera de llover así que nos sentamos en un restaurante y
nos pedimos una pizza y una ensalada más las bebidas 17 $, cuando nos íbamos al hotel estaba
todo vacío, apenas había gente en la calle.
Phnom Penh, pues no sé yo que decir, es una ciudad sucia muy suciaaaaa, y huele mal muy malllllll, es una pena, y muchas, muchas motos.